retos de la gestión sostenible de empresas en 2022

Tres retos para la gestión sostenible de empresas en 2022, según APlanet

Compartir este contenido

En un contexto actual en el que la sostenibilidad es un pilar cada vez más importante de un mayor número de empresas, los negocios que no la tienen en cuenta pueden perder reputación. Esto es así, además, por la cada vez mayor conciencia medioambiental de una parte de la ciudadanía, sobre todo joven. Por eso, hay que saber cuáles son y afrontar los retos de la gestión sostenible de empresas en 2022 y en años venideros.

Y eso es precisamente lo que, en una nota de prensa, explica la startup APlanet, especializa en tecnología aplicada a la gestión de la sostenibilidad corporativa.

“El concepto de sostenibilidad se encuentra en un momento de efervescencia. Si bien la motivación inicial para muchas compañías pueden ser los requerimientos regulatorios, cuando se dan cuenta de que una gestión adecuada de la sostenibilidad no solo representa una ventaja competitiva, sino también una oportunidad de negocio, van pasando de la obligación a una cierta convicción de que una no evolución en este sentido puede significar quedarse fuera del mercado”.

Laura Sánchez Navarro, directora global de Customer Success de APlanet

Además, la experta en sostenibilidad asegura que sus clientes «perciben cada vez más que sus grupos de interés (inversores, clientes, empleados, etc.) les exigen que vayan más allá de lo financiero, y para ello necesitan dotarse de las estructuras adecuadas y de procedimientos de gestión sólidos». 

“El camino es largo, pero lo importante es avanzar con paso firme, y sin duda este año hemos notado ciertos indicios de madurez en muchas de las empresas que utilizan nuestra herramienta de gestión. Por ejemplo, en la definición de nuevas tipologías de indicadores monitorizados, que ya van mucho más allá de lo obvio y aterrizan en KPIs íntimamente relacionados con el negocio”, explica.

Los retos para la gestión sostenible de empresas en 2022

De cara a la gestión sostenible de empresas en 2022, APlanet percibe tres grandes retos para que las organizaciones continúen mejorando, en base a la política ambiental de una empresa que ya debe estar intrincada en la gestión global. Estos son, tal y como recoge el comunicado de prensa:

Involucrar a todos los actores y departamentos de la compañía

Al tratarse de una estrategia multidisciplinar, para APlanet involucrar a todos los actores y departamentos de una empresa «es fundamental». A pesar de lo cual, reconoce que «da lugar a dificultades relacionadas con la naturaleza diversa de las acciones e iniciativas empresariales llevadas a cabo por las diferentes áreas y sus propios indicadores o medidores de desempeño, así como con la descentralización de las fuentes de información».

Concienciar de la influencia que tiene en el negocio

El segundo de los retos de la gestión sostenible de empresas en 2022 está en «convencerse de su verdadera importancia, que va mucho más allá de la normativa, ya que repercute directamente en el mejor funcionamiento y evolución de la compañía».

«La empresa que optimiza procesos, reduce costes, aporta impacto positivo a la sociedad y el medio ambiente y cuida a las personas es más atractiva para inversores y clientes, y también para captar talento», afirma la nota de prensa de APlanet.

Consolidar un equipo humano especializado

Y, en tercer lugar, la startup apunta que «los especialistas en Sostenibilidad son muy valorados, porque al tratarse de un nuevo sector laboral cada vez más demandado existe todavía una cierta escasez de estos perfiles profesionales». Por lo que afirma que para que la estrategia de sostenibilidad sea sólida y esté conectada de forma eficaz con el negocio «es necesario contar con expertos capaces de aportar una visión holística a su gestión».

“2022 será el año en que se implanten las medidas para dar respuesta a los requerimientos de las novedades regulatorias europeas que ha habido este año, como la nueva Directiva sobre información relativa a sostenibilidad empresarial (CSRD), el Reglamento de Divulgación en materia de finanzas sostenibles (SFDR) o la Taxonomía. Las empresas deberán estar pendientes de ello, pero lo más importante para acometer cualquier necesidad que venga impuesta desde fuera es contar dentro con un proyecto, una estrategia y un equipo de sostenibilidad sólidos y rigurosos”, concluye Laura Sánchez.

Etiquetas: Sin etiquetas

Añadir un comentario

Tu correo electrónico no será publicado. Los campos requeridos están marcados